NO LIMPIAMOS, CREAMOS CONCIENCIA AMBIENTAL

¿Qué hacemos?

Objetivos:
 Ser el medio para la concretización de las ideas de los jóvenes en temática ambiental.
 Reducir significativamente el índice de arrojo de basura por el ciudadano de a pie.

Equipos
Equipo de Bus 0
Objetivo Específico:
Concienciar a los pasajeros de la problemática ambiental actual.
Desarrollo:
Actividad realizada en el transporte público en la cual dos voluntarios expresan un pequeño mensaje a favor del ambiente y de manera simbólica se les pide que arrojen sus posibles desechos a una bolsa de basura; ojo, el objetivo no es recoger basura sino evitar que la misma llegue al piso.

Equipo de Teatro en Rojo
Objetivo Específico:
Sensibilizar a los ciudadanos con el malestar generado por la contaminación.
Desarrollo:
Actividad realizada en el crucero peatonal mientras el semáforo esté en rojo. Se interpreta un mini teatro cómico en el cual se refleja una situación cotidiana: un ciudadano arroja la basura al piso y un evento inesperado le hace cambiar de parecer.

Equipo de ECOlegio
Objetivo Específico:
Capacitar a niños y adolescentes sobre el adecuado uso de residuos sólidos y el reciclaje.
Desarrollo:
Visita a los colegios: Se brindan charlas, se forman dos equipos. Se realiza una competencia de conocimientos y de actividades lúdicas entre ellos para comprobar si las charlas de ambos temas se aprendieron de manera adecuada.

29 nov 2011

¿Basura?: La de mis tiempos…

Existe una duda enorme sobre qué le suceden a nuestros residuos, sabemos que el camión de la basura se la llevará, pero ¿a dónde termina toda esa basura? De repente en manos de recicladores informales o en algún botadero, lo ideal sería que terminen en un relleno sanitario, pero qué pasa con aquellos equipos electrónicos que dejamos de usar. El incremento de la tecnología nos hace renovar de refrigeradoras, cocinas, televisores y hasta de celulares. Entonces ¿dónde están nuestros antiguos equipos?

“Cuando a mí me regalan televisores o radios, yo simplemente los dejo allí tirados, para qué voy a quererlo si aquí no hay luz”, “…Yo los guardo en el cuarto, allí los dejo un buen rato, no los puedo botar, tú sabes cuánto me ha costado ese televisor para al final botarlo así nada más…”, “Las cosas van cambiando y uno también tiene que hacerlo, lo pongo al borde de la pista, sé que los cachineros al final se lo llevan… ¿a dónde? Dios sabe dónde”

Los RAEE (Residuos de aparatos eléctricos y electrónicos) son quizá el grupo de residuos que más desconcierto causa, a pesar de que es el grupo más contaminante. Y es que en el Perú, hablar de la basura es casi un tabú, mejor dicho, casi un insulto porque es hablar de excremento, porquerías, animales muertos, olores hediondos, entre otros. Un país poco dedicado que apenas tiene nociones de reciclaje de papeles, plásticos y vidrios, está penetrando en el mundo de los RAEE de manera exitosa.

Tu basura es mi progreso
En el Perú solo hay dos empresas dedicada exclusivamente al reciclaje de los RAEE. Una de ellas es COIPSA y tiene como Jefa de Producción a Pilar Salaverry. “Antes nos demorábamos todo el día en desarmar un teléfono, una computadora y ahora se hace en minutos, todo es tecnología peruana. Hay un club de Madres que les obsequiamos los imanes y ellos tuvieron la iniciativa para convertirlo en muñecas y así se forma la cadena de reciclaje.”

La otra empresa es San Antonio Recycling, donde los ingenieros como Yosué Giménez trabajan día y noche en el arduo proceso de reciclar estos elementos. “Primero viene el camión con los materiales y de allí se pasa al prensado. El plástico también se tritura, se saca lo de la carcasa de los monitores, los CPUs, teniendo en cuenta que las computadoras tienen material altamente contaminante y de no ser separado de manera correcta puede resultar nocivo”

“Cómo voy a reciclar mi televisor pues, no te digo que no tengo luz y quieres que recile… ¿recicle? Yo no sé hacer esas cosas”, “Sí pues, seguramente aprovechan algo de esos aparatos, creo que los trituran y los queman después, tanta basura dónde se va a quedar pues, tienen que quemarla”, “Algo de eso escuché, por eso pasan los cachineros rebuscando las cosas, a veces encuentran cobre y esas cositas que al final las venden o algo. Creo que le dan cincuenta centavos por kilo de cobre… deben tener plata ¿no?”


¿La basura crece?
La cantidad de equipos eléctricos y electrónicos que se demanda en los últimos años, más el avance frenético de la tecnología nos dan como resultado un panorama complejo en el trabajo de los RAEE. “Lo que es residuos de computadoras en el año 95 se tenían menos de mil toneladas, en el 2009 ya estaba en 38 mil toneladas: un crecimiento tremendo. Es necesario trabajar en este tema para que no vayan más adelante a manos de informales donde lo utilizan, pero dejando los desperdicios en cualquier lugar”, señala Raúl Roca Pinto, Director General de Calidad Ambiental de Ministerio del Ambiente (Minam)




Ana María Gonzáles del Valle, también del Minam, añade “Siete mil toneladas de celulares que ya vencieron su vida útil y más de 37 mil toneladas de residuos electrónicos, entonces saquémoslos de las casas y llevémoslo a la campañas”. Gonzáles se refiere a campañas como la de Tecnorecicla 2011, emprendida por el Minam en alianza con empresas nacionales y extranjeras con el objetivo de que los ciudadanos peruanos lleven sus RAEE al lugar adecuado para el manejo de estos equipos.




“No sé si llevar mis dos radios a la campaña, a pesar de que no los use… mis hijitos juegan con esos aparatos”, “No creo que pueda llevarlo, el tiempo es muy corto y tengo muchas cosas que hacer”, “Yo prefiero seguir botándolo a la pista, si igual lo van a recoger y lo van a reciclar” Estas tres madres de familia trabajan en un mercado, y a pesar de los pernicioso que pueden resultar estos equipos en desuso aún no están dispuestas al tratamiento adecuado de las RAEE. El Perú es el pionero en la región en tratar estos residuos, un apoyo constante a este tipo de campañas no vendría nada mal a nuestro país.









7 sept 2011

¿Qué hacer luego del periodismo ecológico?

Es común que uno se espante cada domingo con la TV o el periódico cuando tocan temas sobre contaminación ambiental, desastres naturales, deterioro de hermosas partes de nuestro planeta, etc… Ante esta serie de documentales, reportajes o entrevistas la reacción del televidente o lector puede ser de cuatro tipos diferentes: la de ignorancia total, que conlleva un desapego del tema; la de interés menor, mientras dure los minutos del vídeo o hasta que se perciba el punto final en el periódico, para luego seguir apretujándose contra el sillón y buscando su mejor ángulo de “descanso”;la interés mayor, cuando alguien busca un plus de información que siente que quedó vacía y desea saciarla pues el tema es de su completo interés por lo que necesita realmente verse haciendo algo por revertir ello, pero no lo encuentra; la de interés superlativo, que supera a la anterior y decide finalmente decir: si no hay quien haga algo por esto pues lo haré yo, se pone de pie y encamina su marcha hacia aquel objetivo.
Lo ideal sería que luego de percibir tal información se quede solo en el tercer estadio (de interés mayor) y no se pase al cuarto. Explico detalladamente el porqué: ante una información interesante y competente que busca mover a la ciudadanía se suele recurrir a algún grupo estatal o particular para ver cómo poder solucionar el problema, pero al no encontrarlo o se decide no hacer nada o se decide hacerlo uno mismo (interés superlativo). Entonces sería idóneo que estos grupos especializados en el tema ya existan, pero al no haberlos se crean algunos grupos menores. Ojo, que no está mal que estos existan, el problema subyace en que ante la variedad de grupos se torne dificultoso convocar masivamente a algo representativo para la sociedad y en vez de remar todos hacia un lado, sucede que nadamos en círculos minúsculos compitiendo entre nosotros, cuando en realidad todos tenemos un objetivo afín.
Es así que la solución de estos tipos de problemas no está en crear más voluntariados u organizaciones especializadas en el tema, si no en reforzar los ya formados, complementarlos de nueva gente, de nuevas ideas y fortalecerlos para que se convierta en una verdadera RED que esté unida y tienda a unir cada vez más a las personas que se contactan a fin de cambiar esa realidad pesimista. La próxima vez que leas una noticia sobre ecología en el periódico o veas un reportaje sobre minería informal, ponte a pensar en qué tipo de reacción quieres tomar para que luego lleves a cabo todos tus pensamientos y cruces esa espesa línea entre la indignación desde tu casa con el control remoto en mano o la acción constructiva que se ensucia la manos y realiza con el ejemplo lo que en algún momento tuvo en mente. Antes de avanzar con enormes proyectos sobre calentamiento global, lluvia ácida, deterioro de la capa de ozono, etc. Enseñemos que el primer paso consiste en arrojar la basura al tacho y después de ello la misma sociedad valorará su entorno más cercano, su ambiente.